La tercera Cumbre Mundial sobre Discapacidad concluyó en Berlín con compromisos tangibles para promover la inclusión de la discapacidad. Las personas con discapacidad, que representan el 15% de la población mundial (aproximadamente 1.300 millones de personas), suelen quedar excluidas de los proyectos de desarrollo. En respuesta a esta brecha y en el contexto de la disminución de la ayuda para la inclusión, la Cumbre introdujo un nuevo objetivo: garantizar que al menos el 15% de los proyectos de desarrollo a nivel nacional se centren en la inclusión de la discapacidad. Esta meta se refleja en la Declaración de Amán-Berlín, adoptada hoy por más de 80 gobiernos y organizaciones.
A lo largo de la Cumbre, gobiernos, organizaciones del sector privado y actores del desarrollo asumieron más de 800 compromisos para mejorar la accesibilidad y la participación significativa de las personas con discapacidad. Organizada conjuntamente por el Ministerio de Desarrollo de Alemania, el Reino Hachemita de Jordania y la Alianza Internacional de Discapacidad (IDA), la Cumbre reunió a 4.500 participantes de casi 100 países, incluyendo personas con discapacidad, representantes gubernamentales y líderes de la sociedad civil.
A lo largo de más de 60 sesiones, los debates se centraron en fortalecer la implementación de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) y garantizar que los compromisos conduzcan a cambios tangibles.
En la ceremonia inaugural, el Canciller Federal de Alemania, Olaf Scholz, reafirmó el compromiso de su país con la inclusión de la discapacidad, especialmente en un momento en que los países están recortando su financiación para la inclusión. El Canciller se comprometió a alcanzar el objetivo de 15% y anunció una iniciativa conjunta con Jordania sobre educación inclusiva.
El Rey Abdullah II de Jordania hizo un llamado al compromiso y la acción constantes para garantizar que todas las personas puedan vivir con dignidad, felicidad y esperanza, enfatizando que la inclusión no se trata sólo de accesibilidad, sino también de reconocer el potencial inherente a cada ser humano y crear entornos donde todos puedan contribuir.
Nawaf Kabbara, presidente de la Alianza Internacional de la Discapacidad (IDA), enfatizó que la verdadera inclusión de la discapacidad no se puede lograr sin que las organizaciones de personas con discapacidad (OPD) participen en la toma de decisiones de financiación. Enfatizó que la inclusión debe ser «con» las OPD, no «para» ellas.
La Declaración de Amán-Berlín establece el objetivo de que al menos 15% de los proyectos de desarrollo estén diseñados específicamente para promover la inclusión de la discapacidad. Actualmente, sólo el 6% de los proyectos de desarrollo contribuyen directamente a este objetivo.
La ministra alemana de Desarrollo, Svenja Schulze, señaló que las políticas de desarrollo sólo pueden tener éxito cuando todas las partes interesadas colaboran, destacando que la Declaración de Amán-Berlín es un compromiso global, no sólo una promesa de los países donantes. Enfatizó que la verdadera inclusión beneficia no sólo al 15% de las personas con discapacidad, sino a la sociedad en su conjunto.
Durante la Cumbre también se anunciaron varias iniciativas clave. El Ministerio de Asuntos Exteriores, de la Commonwealth y de Desarrollo (FCDO) del Reino Unido se comprometió a lanzar un Vehículo de Inversión en Tecnología de Asistencia a través del programa AT2030, con el objetivo de recaudar 60 millones de dólares para 2026, a la vez que copresidía la Red de Acción Mundial sobre la Discapacidad (GLAD) para fomentar alianzas globales para la inclusión de la discapacidad. UNICEF se comprometió a asignar el 10% de su presupuesto anual a niños con discapacidad para 2030, ampliar la recopilación de datos y ampliar los sistemas de educación y protección inclusivos en 50 países. La AIF se comprometió a fortalecer las OPD en más de 100 países para influir en las políticas, lanzar un programa de liderazgo para 80 jóvenes con discapacidad y colaborar con el Fondo Mundial para la Discapacidad de las Naciones Unidas para impulsar la implementación de la CDPD en 50 países.
En Jordania, 88 organizaciones nacionales —incluyendo organismos gubernamentales, sociedad civil, mundo académico, medios de comunicación y sector privado— asumieron 133 compromisos para promover los derechos de las personas con discapacidad. Estos compromisos ponen de relieve el firme compromiso de Jordania con la dignidad, la igualdad y la plena participación de las personas con discapacidad.
Se anunció una nueva alianza entre Alemania y la Unión Africana para fortalecer las organizaciones de personas con discapacidad en África, con especial atención a los jóvenes y las mujeres. La iniciativa educativa multilateral «La Educación No Puede Esperar» colaborará con Alemania, el Reino Unido, la Asociación Internacional de Fomento (AIF) y el Desafío de Educación de las Niñas para mejorar la recopilación de datos y la rendición de cuentas en materia de educación inclusiva en las regiones afectadas por crisis para 2028.
La Declaración de Amán-Berlín puede consultarse en el sitio web de la Cumbre. Cabe destacar que Chile no es uno de los países firmantes de dicha declaración.
La Cumbre Mundial sobre Discapacidad es la plataforma internacional más importante para promover los derechos y la inclusión de las personas con discapacidad. La primera cumbre se celebró en Londres en 2017 y la segunda, en 2022, se realizó de forma virtual debido a la pandemia de COVID-19. La cumbre de Berlín es la tercera Cumbre Mundial sobre Discapacidad que se celebra. Cada cumbre está organizada por tres coanfitriones, con la Alianza Internacional de Discapacidad como coanfitrión permanente.
Fuente: Secretaría de Cumbre Mundial sobre Discapacidad. Crédito de imagen: X @GDS_Disability.